Texto original en inglés
Perspective Taking to Foster Positive Family-School Partnerships
Perspective Taking involves thinking about another person’s
- mental state
- emotions
- feelings
- perceptions
By default, the mind relies on viewing things from one’s own perspective to make quick judgments and impressions. One may have to actively push past the mind’s tendency to do what is easiest. Certain situations may elicit automatic perspective taking, and most situations require a deliberate effort and some practice to see situations through another person’s perspective.
Misunderstandings can occur when families and caregivers address school staff in a way that the staff perceives as harsh or critical, or when families and school staff have differences in background and experiences; the differences and misunderstandings can damage rapport.
Practicing perspective-taking can help increase understanding and create or maintain rapport, leading to increased positive collaboration with families.
Consider the following to help you practice perspective taking to develop understanding and build positive partnerships.
Reflecting on Barriers Impacting Families’ Level of Engagement
We only see the tip of the iceberg when understanding what other people may be going through in life. Many factors and variables contribute to what a person feels and perceives; if a family is not engaging in the home-school partnership or communicates in a contentious way, practice perspective taking while considering the following circumstances that may impede their ability to partner with you.
PAST SCHOOL EXPERIENCES
Families’ and caregivers’ prior school experiences may cause them to feel discouraged in participating in the home-school partnership; for example,
- Families and caregivers may have negative experiences in prior school systems where disproportionate, harsh punishment was applied to their students for minor infractions.
- Students and caregivers may have experienced insufficient support for their needs where the student and family felt “pushed out” by their previous schools.
- Students and families may have faced discrimination and bias at their former schools.
HOME CIRCUMSTANCES
Families may be experiencing a variety of circumstances that may impact the way they interact with school staff or the degree to which they are currently able to engage in the school-family partnership; those circumstances can include,
- Divorce or separation.
- Experiencing domestic violence.
- Moving into a new home.
- Grieving the death of a loved one or family pet.
- Being a caregiver of a child or a loved one with special needs.
- A family member in the home with untreated mental health or substance use issues.
- Separation from family members who are in the military.
SOCIOECONOMIC CIRCUMSTANCES
Families may wish to engage as partners in their student’s learning and may want to collaborate to support student interventions but may face socioeconomic barriers; for example,
- Caregivers may be required to work two to three jobs to make ends meet. Families and caregivers may chronically struggle with access to clothing, food, healthcare, and childcare for their children.
- The family may be experiencing homelessness and does not have a consistent way to be reached by phone.
- Families may experience heightened stress levels living in neighborhoods with high crime rates where the family is frequently concerned for the safety of their children.
When dealing with families and caregivers who may be upset or disengaged, challenge yourself to practice perspective taking.
Traducción al español de Estados Unidos
Toma de perspectiva para fomentar una colaboración positiva entre la familia y la escuela
La toma de perspectiva implica pensar en la situación de otra persona.
- su estado mental
- sus emociones
- sus sentimientos
- sus percepciones
A la hora de emitir juicios rápidos, la mente suele observar las cosas solo desde la perspectiva propia. Es probable que tenga que hacer un esfuerzo para evitar que la mente siga la tendencia de ir por el camino más fácil. Determinadas situaciones pueden provocar una toma de perspectiva automática, y la mayoría de las situaciones requieren un esfuerzo deliberado y cierta práctica para ver las cosas desde la perspectiva de otra persona.
Pueden producirse malentendidos cuando las familias y los guardianes se dirigen al personal de la escuela de una manera que el personal percibe como dura o crítica, o cuando ambas partes provienen de contextos diferentes o atravesaron experiencias distintas. Estas diferencias y malentendidos pueden dañar la relación.
Practicar la toma de perspectiva puede ayudar a aumentar la comprensión y generar o mantener la confianza, lo que conduce a una mayor colaboración positiva con las familias.
Tenga en cuenta los siguientes aspectos para practicar la toma de perspectiva y así desarrollar comprensión y forjar alianzas positivas.
Reflexión sobre las barreras que afectan el nivel de participación de las familias
A la hora de entender lo que atraviesan las demás personas en su vida, por lo general, solo vemos la punta del iceberg. Son muchos los factores y las variables que contribuyen a los sentimientos y percepciones de una persona. Si una familia no participa en la alianza hogar-escuela o se comunica de forma conflictiva, practique la toma de perspectiva y tenga en cuenta las circunstancias que pueden dificultar esta colaboración.
EXPERIENCIAS ESCOLARES ANTERIORES
Las experiencias escolares previas de las familias y los guardianes pueden haberlos desmotivado a participar en la alianza hogar-escuela, por ejemplo:
- Las familias y los guardianes pueden haber sufrido experiencias negativas en otros sistemas educativos, en los que se aplicaban castigos desproporcionados y severos a los estudiantes por infracciones menores.
- Los estudiantes y los guardianes pueden no haber tenido el apoyo suficiente en lo que respecta a sus necesidades y haberse sentido “expulsados”.
- Los estudiantes y las familias pueden haber sufrido discriminación y haber sido objeto de prejuicios en otras escuelas.
CIRCUNSTANCIAS DEL HOGAR
Es probable que las familias estén atravesando una variedad de circunstancias que afectan el modo en que interactúan con el personal de la escuela o el grado de participación en la alianza escuela-familia, por ejemplo:
- divorcio o separación;
- violencia doméstica;
- mudanza a un nuevo hogar;
- duelo por la muerte de un ser querido o de una mascota;
- cuidado de una niña, un niño o un ser querido con necesidades especiales;
- miembro de la familia con problemas no tratados de salud mental o de consumo de drogas;
- separación de determinados miembros de la familia por prestar servicios militares.
CIRCUNSTANCIAS SOCIOECONÓMICAS
Es probable que las familias deseen participar en el aprendizaje de sus estudiantes y colaborar en las intervenciones, pero estén atravesando dificultades socioeconómicas, como por ejemplo, las siguientes:
- Los guardianes pueden necesitar dos o tres empleos diferentes para cubrir los gastos. Las familias y los guardianes pueden tener dificultades crónicas para acceder a la vestimenta, los alimentos, la atención sanitaria y el cuidado infantil.
- La familia puede haberse quedado sin hogar y no contar con un teléfono fijo.
- Las familias pueden estar experimentando mayores niveles de estrés por vivir en vecindarios con altas tasas de delincuencia y tener una preocupación constante por la seguridad de sus hijos.
Cuando trate con familias y guardianes que puedan estar disgustados o poco comprometidos con el aprendizaje de sus hijos, intente practicar la toma de perspectiva